Consejos para quedar embarazada

Cómo se puede quedar y no quedar embarazada

Tanto si deseas saber qué hacer para quedar embarazada o cómo se puede no quedar embarazada, estos consejos te ayudarán a calcular el tiempo de ovulación, para conocer tus días fértiles, en los que es posible que se produzca un embarazo. De tal modo, sabrás cómo evitar un embarazo no deseado y cómo puedes quedar embarazada, si es lo que hace tiempo estás buscando.

Existen muchos métodos para determinar el tiempo de ovulación y por consiguiente, los días fértiles en los que puedes quedar embarazada, que te servirán tanto si buscas un embarazo, como si necesitas saber como no quedar embarazada.

Las dos formas más populares son la medición de la temperatura basal y el estudio del flujo vaginal. Para determinar tu posibilidad de quedar embarazada por la temperatura basal antes de acostarte deja un termómetro a mano. Al despertar y antes de levantarte, controla tu temperatura bucal o rectal, durante 5 minutos. La temperatura basal varía entre 36,5 a 36,7 grados centígrados antes de la ovulación. Los cambios hormonales que se producen con la ovulación elevan unos 0,5 grados centígrados la temperatura, que se mantiene así, hasta el próximo período menstrual.

Por otra parte, el moco cervical es la variante del flujo vaginal, que indica el inicio del período fértil. Toma una muestra y verifica su aspecto. Durante el período no fértil el moco es escaso, blanquecino y pegajoso. Dos o tres días antes de la ovulación el flujo se vuelve abundante, transparente y forma hilos (similar a la clara del huevo). El período más fértil comienza en el último día que se tiene este tipo de flujo. Si prestas atención a estos dos datos y sigues un registro mes a mes, empezarás a conocer las características de tus ciclos y te resultará más fácil, determinar cuando puedes llegar a quedar embarazada y cuando no.

Se puede quedar embarazada teniendo relaciones sexuales durante los 3 días antes de la ovulación hasta un día después de la misma, ya que los espermatozoides pueden vivir 72 horas dentro del útero y los óvulos, sólo 24 horas.

Además, puedes recurrir como método adicional para conocer tus días fértiles a la Calculadora de la ovulación y si quieres a toda costa lograr un embarazo, también puedes probar los remedios naturales para quedar embarazada. Si finalmente, logras un embarazo, recuerda que cuidarse durante la gestación es saludable y para ello nada mejor que recurrir a los beneficios de las hierbas durante el embarazo y seguir una dieta en el embarazo saludable. 

 

Tener un hijo es el proyecto más grande de nuestra vida, y aunque es un proceso que la mayoría de veces viene dado naturalmente, hay algunos consejos para seguir antes de lograr el embarazo que favorecerán la concepción y un embarazo sano.
A pesar de que muy pocas mujeres se prepara para el embarazo, hay ciertos pasos referidos a la salud, a nuestra mente y a nuestro entorno que podemos seguir tanto para lograr el embarazo como para que éste sea más saludable y seguro.

• Abandonar los hábitos perjudiciales para la salud, especialmente los tóxicos, como el tabaco, el alcohol y otras drogas. De este modo, no sólo favorecemos que se produzca la concepción sino que evitamos daños al futuro bebé. Por supuesto, este puto se aplica igualmente al futuro papá.

• Podemos revisar nuestro peso para tratar de conseguir el peso ideal de cada una. Las mujeres con sobrepeso pueden consultar al especialista para adelgazar sin arriesgar la salud. De este modo durante el embarazo no se producirán situaciones de riesgo provocadas por la obesidad, aunque recordemos que el aumento de peso “ideal” en el embarazo no es el mismo para todas las mujeres.

• La mejor manera de mantener o lograr un peso ideal es la práctica de ejercicio físico. Si no estamos en forma, lo mejor es que empecemos a lograrlo ya, preferiblemente mediante la realización de algún ejercicio que después podamos seguir practicando durante el embarazo.
• También siguiendo recomendaciones médicas podemos revisar y mejorar nuestra dieta, que ésta tenga las calorías necesarias y la cantidad adecuada de hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales.
• Acudir al ginecólogo para una visita pre-concepción, que puede resultar tan importante como las consultas prenatales. El especialista hará un seguimiento de nuestra historia clínica, indagará acerca de posibles riesgos, mandará un análisis de sangre para detectar anemia u otros trastornos (especialmente infecciones que pudieran afectar al futuro bebé, como hepatitis, sífilis, sida…), recomendar suplementos vitamínicos…

• En relación al punto anterior, se recomienda tomar un suplemento de ácido fólico antes del embarazo, vitamina esencial para prevenir defectos congénitos en el bebé.

• Si es necesario, ponerse las vacunas contra la rubéola o la varicela, enfermedades que pueden dañar al bebé. Hay que consultar al médico la conveniencia o no de administrar otras vacunas para la futura mamá, pues algunas no estar recomendadas o no ser necesarias.
• Mediante una visita preventiva al dentista evitaremos hacerlo durante la gestación. Una limpieza de boca y la detección de posibles problemas puede prevenir complicaciones posteriores, pues sabemos que las encías se ven afectadas durante la gestación en muchas ocasiones, y es necesario mantenerlas en buen estado. Esta revisión pre-concepcional no implica que dejemos de acudir al dentista después, pues precisamente durante el embarazo hay que poner más atención a la salud dental para detectar y controlar problemas como la gingivitis.
• Antes del embarazo deberíamos tener pensadas (si aún no resueltas) ciertas cuestiones “infraestructuales” y de organización, como si la casa o el mobiliario necesitarán alguna reforma con la llegada del bebé. Siempre será mejor iniciar estar remodelaciones antes del embarazo, cuando el estrés o el cansancio que dichas situaciones suelen conllevar son mucho más perjudiciales.

• Informarse y leer acerca de hábitos saludables, fertilidad, embarazo y crianza. Es bueno formarse acerca del gran paso que estamos a punto de dar y acercarse a la maternidad de un modo seguro (hasta cierto punto, pues las inseguridades siempre aparecen de uno u otro modo) y crítico. Este apartado debería ser compartido con la pareja, pues al fin y al cabo en la mayoría de casos el embarazo y sobre todo los hijos no son exclusivos de mamá.

Este decálogo de consejos para antes de quedarse embarazada favorecerá que la concepción se produzca y tengamos un embarazo más saludable, así como para que estemos más preparadas para el embarazo y la maternidad.